Es un mar que aparece a nuestro paso
y en el suelo de asfalto se serena,
al desnivel en tierra si no drena
se mantiene relleno, como en vaso
que piso y piso y salto y lo traspaso,
es un mar pequeñito y un espejo,
mis barcos de papel en su agua dejo,
unas veces los salto y no me mojo,
otras rompo el espejo y me remojo
y con botas de goma me protejo.
Y la primera letra es consonante,
de nuestro abecedario la tercera,
la segunda es callada y verdadera,
la tercera es vocal y va delante,
dos consonantes más y tiro el guante,
una letra cerrada finaliza,
dos sílabas contiene y vocaliza
la palabra encerrada en la escritura,
porque sé de tu esfuerzo en la lectura
a tu mente el acierto se desliza.
Antonio Pastor Gaitero
Fotografía del libro «Adivinanzas, el libro olvidado y otros cuentos» Cirodelia (Adobe Stock) publicado por Editorial Juglar – de Antonio Pastor Gaitero