Conozco la vida

CONOZCO LA VIDA Valentín Martín

Todo el tiempo musical de Antonio Pastor Gaitero está lleno de acentos con la intensidad que un día prendió su actividad de hombre. Qué es un hombre. A veces uno se asoma al mundo, al pequeño mundo donde caben a lo sumo unas palabras para redimir la nada. Y ve cómo crece, en la noche de Madrid, la condición más humana de un cantor donde la sensibilidad poética tiene también su sitio. Compromiso: sonó altiva la voz contra el maltrato de la mujer, y dolorosamente dulce al recordar a la compañera Cristina Cocca, de adiós reciente. Todos los nombres son más sonoros en la guitarra de Antonio. Y todos los sucesos dejan de ser aparentes y tocan tierra al salir de los atisbos en la voz de Antonio. Eh aquí un hombre que sabe descifrar la vocación de los afluentes que quieren ser ríos, y de la revolución de los arrabales reclamando rosas en el sitio de un matorral. Intimidad: hurgó en su memoria nocturna y encontró este poema al que un día yo abrí las puertas con mi firma que dejó de ser mudez o hueca soledad de soledades. Aquella hija del medio siglo que pudo ser hoy retrato de un coral de juventud y se quedó en un misterio para las advertencias de un poeta archiviejo, imprudente, y con los ayeres agujereados de desmemoria.

Es un ejemplo de que Antonio Pastor Gaitero es mucho más que un murmullo alado. Una lámpara que jamás se apaga.

Valentín Martín

Y crecemos a golpes

En este poema canción utilizo unos versos de Gabriel Celaya , cita que da pie al poema.

No es una poesía gota a gota pensada

no es un bello producto, no es un fruto perfecto

es lo más necesario, lo que no tiene nombre

son gritos en el cielo y en la tierra son actos.

Porque vivimos a golpes, porque a penas sino dejan decir que somos quien somos

nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno estamos tocando el fondo.

Gabriel Celaya

Y crecemos a golpes y nos hacemos fuertes,

endebles al amor a la soledad pequeños

y fuertes al orgullo y al egoísmo fuertes

y débiles al beso, al adiós y a la caricia.

Y seguimos creciendo ante la duda y el miedo,

para vencer el miedo nos mentimos gritando

y escuchamos negando para vencer la duda,

almacenamos ira perdiendo tolerancia,

el poder nos enseña a leer libros en blanco

y nos regala el miedo a los dioses y a la noche,

y así seguimos solos venciendo soledades.

Entre el amanecer y la noche hay tantos pasos,

tanto mar que sentir y tanta sal en las olas,

tanta savia nutriendo raíz, flores y frutos,

tanta esperanza en sueños creciendo y en sonrisas,

tanto amor, tanta entrega dormida entre los brazos,

tantos besos que dar, tanta música en los labios,

que alejamos la noche en cada creciente luna

improvisando soles para inventar mañanas,

y seguimos creciendo y juntos seremos fuertes.

Antonio Pastor Gaitero

Concierto 27 de octubre

Recién salida del horno esta canción que estrenaré el día 27 de octubre, en la sala Jazzville– C/ Jesús Aprendiz 19. Poema del libro «Con nombre propio»

D6 F#m

No esperes a que asfalten el camino

Em A7 D6

ni a que alumbren la senda y la señalen con líneas fluorescentes

Em A7

ni temas al recodo,

D6 F#m

ni temas a las ramas si en otoño

B7 Em

brazos parecen que atraparte ansían

G

no esperes a la aurora

F#m

para iniciar el paso

Em A#7 A7

hasta el motivo que incesante te nombra,

G Fm Em A7

ni temas cuando el viento desordene las hojas de los árboles

F# Bm

y un silbido prolongue un eco largo

Em A7

que te obligue a mirar atrás con miedo,

D6 F#m B7 Em

En ese esfuerzo que prolonga el paso la meta está esperando.

G F#m Em A7

El paso decisivo es el primero en todos los caminos que te esperan.

F# Bm E A

No olvides colocar en la mochila toda la dignidad que al ser define,

F# Bm Em A7 D6

honradez y respeto y tolerancia, y así será la meta merecida.

Antonio Pastor Gaitero

Como el silencio quedas y agonizas

Como un manto de luz amanecida

diste a mi noche luz enamorada,

a tus labios dejaste acostumbrada

mi boca, por tus besos sorprendida.

Fuiste una hoguera en besos encendida,

como llamas la luz de tu mirada,

como estrella fugaz iluminada

cruzaste por el cielo de mi vida.

Sólo quedan del fuego las cenizas,

apenas la memoria de la llama

mantiene el beso de tu amor despierto.

Como el silencio quedas y agonizas,

como el recuerdo dejas en mi cama

un paisaje de dunas y desierto.

Poema del libro «El musical acento de tu nombre»

Publicado por «Lastura Ediciones»

Concierto en Déjà vu La Fídula

En la Latina, barrio castizo de Madrid, en una sala de conciertos amiga,

presenté en primicia un poema de Rodolfo Serrano de su libro «El frío de los días»

hice canción de sus versos y la melancolía se hizo tango y la soledad bolero.

Concierto en mayo

El día 19 de mayo de 2022 en la sala Jazzville cantaré canciones de poetas amigos y entre ellas, algunas del libro «Con nombre propio» y mi chotis «Con un mantón bordado de claveles» y para conocimiento del respetable que lo es, planto la letra de la canción isofacto, osease, más pronto que tarde, abur

Con un mantón bordado de claveles

calquea la gata alegre en la Arganzuela,

levanta el almidón su falda y vuela

ese volante al bies por las Cibeles.

Me calzo la parpusa y los biseles,

cremallera, chitón, que el cheli jela,

la gata con mirarme me camela,

de litri voy, pincel entre pinceles.

Nos vamos de Cascorro a la Gran Vía,

cangelo da cuando te fija un beso,

si coge le dos dibuja melodía,

me birla la razón y lo confieso

La vida es la caricia de su boca,

cangelo da cuando te fija un beso,

un lirio soy si su querer provoca.

me guinda la razón y lo confieso.

Antonio Pastor Gaitero

Tú sabes que te nombro cuando escribo

Tú sabes que te nombro cuando escribo.

Recuerda que una tarde te quedaste

dormida entre los brazos de la aurora

y se hizo eterno el sueño de los besos

que esperaban el fuego en tu contorno.

Sé que sabes que cuando digo vida

te nombro y te recuerdo,

y cuando escribo beso

te beso y te pronuncio,

sabes que estás en el acento eterno de un adiós

que espera tu regreso.

Que la palabra abraza y te sonríe

porque sentirme vivo fue la causa

que tu mano mi mano protegiera,

que la esperanza de sentir tus labios

en el fondo del sueño permanece.

Sé que sabes que ayer no es el pasado,

que te espero impaciente todavía.

Poema del libro «Con nombre propio»

El beso

Respuesta das en suma de favores,

locura ofrece el rojo de tus labios,

latidos que eliminan los agravios

y cubren a las sombras de colores,

se elevan a la luz de los albores

y dejan en mi boca el pintalabios

con la caricia de tus besos sabios

que enseñan el dulzor de los sabores.

Queda en el beso cuando el beso sella,

un permanente río de presencia,

un ansiado temblor que deja huella.

Un mundo de pasión y de demencia

es fuego en mi interior que amor destella

y despierta mi sueño en la impaciencia.

Antonio Pastor Gaitero

Poema del libro «Con nombre propio»

Guernica, al cuadro de Pablo Picasso

Guernica. Al cuadro de Pablo Picasso

Queda el terror de la guerra

en el lienzo reflejado

y grita el pájaro alado

y el toro a su miedo encierra

y herido el caballo aterra

y la luz desaparece

y el color huye y parece

que escucho un grito en la sombra,

la madre al  hijo renombra

y crece el dolor y crece.

Poema del libro «Con nombre propio» de Antonio Pastor Gaitero. Publicado por «Lastura ediciones»

No puedo decirte adiós

Sé por tus labios que hay un dulzor a fresco en la mañana.

Y porque quiero verte me reflejo en el recuerdo ansiado de tu imagen

que como el mar, tu mar, mi alma serena,

y me reflejo en ti para abrazarte,

para fundir en desnudez locuras y contemplarte, amor, y contemplarte.

Que torpe soy, no percibir tu risa paralela a la vida,

ni tu suma de amor multiplicada en besos.

No puedo decirte adiós,

no puedo pronunciar esa palabra,

la odié desde niño ¿Sabes?

mucho antes quizás de pronunciarla,

no puedo decirte adiós,

no puedo pronunciar esa palabra.

Antonio Pastor Gaitero

Estoy en un otoño permanente

No es un atardecer que anuncie el frío

si el otoño de nuevo se presenta,

ni es un adiós que a toda luz ahuyenta,

ni es ocaso de sombra y desafío.

Es sólo al entender del canto mío

el sueño del verano que se asienta,

y en su descanso nutre y se sustenta

del agua que recoge del rocío.

Estoy en un otoño permanente

esperando al invierno de mis días

como el final que fuera y nunca espero.

Con la alegría de un adolescente

huyo de la tristeza y las sequías

y riego mi paciencia y la reitero.

Antonio P. GaiteroAntonio Pastor Gaiteroantoniopastorcantautor.com

Poema del libro «El musical acento de tu nombre»

Publicado por Lastura Ediciones

Fotografía de Antonio P. Gaitero

BUSCO Y PERSIGO EN TU SONRISA EL BESO

Busco y persigo en tu sonrisa el beso,

beso que vida fue y persiste vivo,

vivo que vida da y vida revivo,

revivo vida que en tu boca apreso.

A la sonrisa de tu voz regreso,

regreso a tu sonrisa y la cultivo,

cultivo el beso para ser cautivo,

cautivo del amor de tu embeleso.

Un corazón con alas me mandaste,

mandaste amor al corazón prendido,

prendido en unas alas de esperanza.

Esperanza de beso que nombraste,

nombraste amor en besos encendido,

encendido de amor que amor alcanza.

Antonio Pastor Gaitero

poema del libro»El musical acento de tu nombre» publicado por «Lastura Ediciones»

Yo seré el beso si tu voz reclama

Yo seré el beso si tu voz reclama

el beso de mi fuego a fuego vivo,

seré para tu sed la ansiada fuente

y el río que en tus aguas desemboca

al destello de luz de tu reflejo,

tu mar, tu sal, tu espuma en las arenas. 

Seremos dos la vida de la llama

seremos dos el beso fugitivo,

la sonrisa del alba en el poniente,

toda razón para quererte es poca,

ámame con locura y sin complejo,

que yo te llevo amor a manos llenas.

Tuya es la voz que en el amor me llama,

tuya es la noche, el beso decisivo,

la fuerza que traslada la corriente

de mi caudal al delta de tu boca,

tuya es la luz paciente del espejo

y es tuyo el mar que en el amor serenas.

Poema del libro «La respuesta del espejo»

Cuando dices mi nombre te renombro

Cuando dices mi nombre te renombro

y me oculto en tus labios y te indago,

y te encuentro desnuda en esa estrella

que pronuncia tu nombre en la mañana

y en luz arrebatada te convierte;

y le canto tu nombre a los espejos

que conservan la luz de la promesa,

la nitidez del alba en tu recinto,

cuando dices mi nombre me parece

que me late la vida entre tus labios.

Si madruga la niebla, yo te nombro,

te nombro hacia la luz porque me embriago

de tu amor sobre el humo de tu huella

que roza el corazón y lo desgrana,

grito tu nombre que pregona verte

en límites del mar, hacia lo lejos,

donde prende el amor y el amor besa;

a tu nombre me abrazo y me precinto,

cuando dices mi nombre me parece

que me late la vida entre tus labios.

Del libro «La respuesta del espejo»

BRINDEMOS HOY QUE EL TIEMPO PARTICIPA

Brindemos hoy que el tiempo participa

de esta irisada luz que no atardece

y nos deja la brisa amanecida

alejando la sombra de diciembre.

Brindemos hoy que el sol de la amatista

violáceo tiñe el mar y  restablece

con un tranquilo viento que acaricia,

el color de la luz cuando amanece.

Brindemos hoy que el viento se desliza

sobre el rumor pausado de las fuentes,

antes que un soplo aleje en despedida

la acompasada paz de la corriente.

No amaneció la mar y agradecida

refleja la mañana adolescente.

Brindemos hoy, brindemos por la vida

antes de que la noche nos despierte.

Antonio Pastor Gaitero

Poema del libro «La respuesta del espejo»

BESA LA VIDA BESOS EN TU BOCA

La tarde es un paseo que provoca

brindar y alzar el vaso de cerveza,

sonreír a la vida si bosteza

y abrazar si la vida te convoca.

Besa la vida besos en tu boca,

todo empieza, el amor también empieza,

se adelanta el ayer en mi cabeza

y el presente se enfoca y desenfoca.

La noche llega y el misterio llega,

y la caricia de tu voz despierta

el minúsculo pulso del anhelo.

Juega la sinrazón y el beso juega,

la noche siempre es nueva y deja abierta

la huella de un volcán para el deshielo.

Antonio Pastor Gaitero

CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

Ni un mal gesto, ni un grito, ni un insulto,

ni amenaza, ni humillación, ni ofensas,

que no frenen tu voz, ni lo que piensas,

que ningún menosprecio quede oculto,

 si tu denuncia es voz, será tumulto.

A todos nos degrada la violencia,

el hombre a de gritar por la decencia

unido a la mujer en la querella,

tan sólo la unidad la fuerza sella,

no dejemos maltrato por herencia.

Las alas de la sonrisa

La pena es un ser vivo

que vivo se mantiene,

y ocupa el tiempo que el amor merece,

 en cambio la alegría es un instante

que juega al escondite,

es frágil y fugaz en la memoria,

en cambio la tristeza te acompaña,

te persigue,

porfía en el recuerdo,

y mientras, la sonrisa perezosa

se olvida de jugar entre tus labios.

El tiempo del dolor es todo un mundo,

y pesa más que la alegría pesa,

por eso a veces caminar no puedes,

mas cuando aflora a tu semblante el beso

la sonrisa renace con sus alas

para elevarte al vuelo,

e ingrávido verás cómo sonríe

feliz, la cara oculta de la luna.

Antonio Pastor Gaitero

La Palabra

…Si la palabra calla algo nos vence,

se hace hielo el acento,

la denuncia descansa en el olvido

y en el amor se paraliza el beso.

Hoy estamos aquí porque la espera

se hace insostenible ante el abrazo

que busca la palabra del consuelo,

estamos para dar sin concesiones

para sumar en voz conocimientos

y el tiempo acude y la palabra vuela

si el verso se hace hogar entre nosotros.

Antonio Pastor Gaitero

Fragmento del poema «LLegan las lluvias y la nieve llega »

del libro «Viaja el tiempo en un tren sin estaciones»

Mundo de muñecos (1973)

Os complace extender sobre nosotros

vuestra tejida capa envolvente,

absorbente y necesaria del miedo

en este mundo de muñecos.

El temor es necesario para la quietud,

para caer en la apatía necesaria,

no ir más allá significa no moverse

y estar parado,

significa ser un instrumento

en vuestras manos.

Nos enseñáis la ignorancia

y nos llamáis analfabetos,

nos cerráis los ojos

para llamarnos ciegos,

pero vendrá el día de los libres, de la luz,

se romperán las cuerdas de los muñecos

y caerán los manipuladores.

Y correremos las marionetas al fin libres,

al fin libres

correremos las marionetas al fin libres.

Antonio Pastor Gaitero (1973)