Al poeta Ángel Guinda

Cada frontera es una cicatriz en la piel de la tierra. ¡Éste no es mi lugar! Ángel Guinda

A Ángel Guinda

Extranjeros en todos los países,

en todos los países hay fronteras,

son una cicatriz las cordilleras

que sangran sin cerrar sus puertas grises.

Lo seremos quizás aunque divises

un claro azul de mar en las afueras,

y una llama de sol en las vidrieras

atrapes con valor y decomises.

Éste no es mi lugar, soy extranjero,

seremos como extraños en la herida,

la tierra sufre y muere en abandono.

No quiero este lugar y amarlo quiero,

y dejo la esperanza en mí prendida,

para sembrarla en ti, riego y abono.

Antonio Pastor Gaitero

(Éste no es mi lugar, soy extranjero),- verso de Ángel Guinda

Poema del libro «Con nombre propio» publicado por Lastura Ediciones

Tango bolero a Rodolfo Serrano

Me lleva a la lectura el calor del verano, y el frío del invierno a los libros me lleva, todas las estaciones del año con sus trenes me abrigan y acarician, y el poema surge y me proteje, y busco en él su ritmo y sus canciones. Estoy leyendo ahora «El frío de los días» de Rodolfo Serrano, (Viejos tangos encontrados en una maleta) y me entretengo en el poema «NADA IMPORTA» y leo y vuelvo a leer, y leo cantando:

Nada importa

Esa dulce tristeza del café sin azúcar

viendo pasar la tarde en las calles sin gente.

Releo algunos libros, escribo alguna carta

que no sé a quién mandarle.

Y después pongo un tango y anhelo un cigarrillo.

Pero si, en este espacio de silencio y miedos,

me viene como un sueño los días que vivimos,

y se meten por todas mis venas y bolsillos

y recorren mis trajes y me besan el cuerpo.

y entonces tu recuerdo como una suave brisa

que ahuyentara, de pronto, el calor del verano.

Y te pienso cuando eras la más bella palabra,

el roce de una mano en los bares oscuros.

Cuando tú regresabas de algún tiempo lejano

y te hacías presente igual que un telegrama

que anunciara la vida pequeña de las cosas.

Rodolfo Serrano

Tú sabes que te nombro cuando escribo

Tú sabes que te nombro cuando escribo.

Recuerda que una tarde te quedaste

dormida entre los brazos de la aurora

y se hizo eterno el sueño de los besos

que esperaban el fuego en tu contorno.

Sé que sabes que cuando digo vida

te nombro y te recuerdo,

y cuando escribo beso

te beso y te pronuncio,

sabes que estás en el acento eterno de un adiós

que espera tu regreso.

Que la palabra abraza y te sonríe

porque sentirme vivo fue la causa

que tu mano mi mano protegiera,

que la esperanza de sentir tus labios

en el fondo del sueño permanece.

Sé que sabes que ayer no es el pasado,

que te espero impaciente todavía.

Poema del libro «Con nombre propio»

A Lorenzo Pastor Gaitero

Hoy levanto mi pluma porque quiero

dibujar en tu voz nuevas palabras

que reflejen el eco del silencio

en la bóveda azul de la memoria

tu presencia de abrazo sosegada.

Allí en donde estés tu voz espero

para hablar de la mar y de la encina,

del origen del aire y la distancia,

de la existente vida y su conjunto,

de todos los planetas y sus formas,

para hablar por hablar, para escucharte,

y responder con canto tu regreso.

Porque llueve en mi pecho la mañana,

te espera en el cobijo de la aurora,

abierto  de rocío y hierbabuena,

y el corazón hendido te suplica

¡Acércate!, Yo sé que no te has ido.

Porque tengo sequía de tus manos

te abrazo ahora que mi pluma cita

en este escrito de vida tolerada

tu nombre en el abrazo que propongo.

Llámame zarco, ya que paciente espero

como la mar los vientos encendidos

para acercar mis brazos a la orilla

de tu serena voz amanecida,

para esperar paciente

la calma que propones,

para jugar al mus de compañeros,

 y recorrer de tapas nuestros bares.

Digo tu nombre, y sabes que te escribo,

en este mar azul donde te espera

un cielo de satén y de cretonas.

Antonio Pastor Gaitero

Poema del libro «Con nombre propio»

BUSCO Y PERSIGO EN TU SONRISA EL BESO

Busco y persigo en tu sonrisa el beso,

beso que vida fue y persiste vivo,

vivo que vida da y vida revivo,

revivo vida que en tu boca apreso.

A la sonrisa de tu voz regreso,

regreso a tu sonrisa y la cultivo,

cultivo el beso para ser cautivo,

cautivo del amor de tu embeleso.

Un corazón con alas me mandaste,

mandaste amor al corazón prendido,

prendido en unas alas de esperanza.

Esperanza de beso que nombraste,

nombraste amor en besos encendido,

encendido de amor que amor alcanza.

Antonio Pastor Gaitero

poema del libro»El musical acento de tu nombre» publicado por «Lastura Ediciones»

A calma suena el nombre que declaro

A calma suena el nombre que declaro

suena a descanso, y a sonrisa suena,

hallarla en uno mismo te serena,

fuerza recibes frente al desamparo.

Ahuyenta del rencor la envidia, faro,

fanal de luz que a tu silencio llena,

de paz la paz que a tu rencor refrena,

con la quietud del mar, yo te comparo.

Paz es el nombre que describe auroras,

paz interior y paz canto y persigo,

para todos la paz y la decencia.

Si paz defiendes, libertad valoras,

armonía es su voz, no me desdigo,

su equilibrio y razón tiene por ciencia.

Antonio Pastor Gaitero

Poema del libro «El musical acento de tu nombre». Publicado por «Lastura Ediciones»

Yo seré el beso si tu voz reclama

Yo seré el beso si tu voz reclama

el beso de mi fuego a fuego vivo,

seré para tu sed la ansiada fuente

y el río que en tus aguas desemboca

al destello de luz de tu reflejo,

tu mar, tu sal, tu espuma en las arenas. 

Seremos dos la vida de la llama

seremos dos el beso fugitivo,

la sonrisa del alba en el poniente,

toda razón para quererte es poca,

ámame con locura y sin complejo,

que yo te llevo amor a manos llenas.

Tuya es la voz que en el amor me llama,

tuya es la noche, el beso decisivo,

la fuerza que traslada la corriente

de mi caudal al delta de tu boca,

tuya es la luz paciente del espejo

y es tuyo el mar que en el amor serenas.

Poema del libro «La respuesta del espejo»

Cuando dices mi nombre te renombro

Cuando dices mi nombre te renombro

y me oculto en tus labios y te indago,

y te encuentro desnuda en esa estrella

que pronuncia tu nombre en la mañana

y en luz arrebatada te convierte;

y le canto tu nombre a los espejos

que conservan la luz de la promesa,

la nitidez del alba en tu recinto,

cuando dices mi nombre me parece

que me late la vida entre tus labios.

Si madruga la niebla, yo te nombro,

te nombro hacia la luz porque me embriago

de tu amor sobre el humo de tu huella

que roza el corazón y lo desgrana,

grito tu nombre que pregona verte

en límites del mar, hacia lo lejos,

donde prende el amor y el amor besa;

a tu nombre me abrazo y me precinto,

cuando dices mi nombre me parece

que me late la vida entre tus labios.

Del libro «La respuesta del espejo»

BRINDEMOS HOY QUE EL TIEMPO PARTICIPA

Brindemos hoy que el tiempo participa

de esta irisada luz que no atardece

y nos deja la brisa amanecida

alejando la sombra de diciembre.

Brindemos hoy que el sol de la amatista

violáceo tiñe el mar y  restablece

con un tranquilo viento que acaricia,

el color de la luz cuando amanece.

Brindemos hoy que el viento se desliza

sobre el rumor pausado de las fuentes,

antes que un soplo aleje en despedida

la acompasada paz de la corriente.

No amaneció la mar y agradecida

refleja la mañana adolescente.

Brindemos hoy, brindemos por la vida

antes de que la noche nos despierte.

Antonio Pastor Gaitero

Poema del libro «La respuesta del espejo»

FELIZ DÍA DE LA POESÍA

Sigo buscando la palabra,

el hogar de tus manos,

su sitio y su acomodo,

el verbo que los pasos

llevan hacia tu casa

los acentos que dan

sentido a las esdrújulas.

Recogeré contigo en sus orillas

la sal y  el agua,

el vino del poema,

y busco el faro que ilumine el beso

que a tus pasos guía,

para que nada evite

que la palabra crezca

siendo abrazo y estribo

para sembrar poemas en tu pecho.

Antonio Pastor Gaitero

BESA LA VIDA BESOS EN TU BOCA

La tarde es un paseo que provoca

brindar y alzar el vaso de cerveza,

sonreír a la vida si bosteza

y abrazar si la vida te convoca.

Besa la vida besos en tu boca,

todo empieza, el amor también empieza,

se adelanta el ayer en mi cabeza

y el presente se enfoca y desenfoca.

La noche llega y el misterio llega,

y la caricia de tu voz despierta

el minúsculo pulso del anhelo.

Juega la sinrazón y el beso juega,

la noche siempre es nueva y deja abierta

la huella de un volcán para el deshielo.

Antonio Pastor Gaitero

CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

Ni un mal gesto, ni un grito, ni un insulto,

ni amenaza, ni humillación, ni ofensas,

que no frenen tu voz, ni lo que piensas,

que ningún menosprecio quede oculto,

 si tu denuncia es voz, será tumulto.

A todos nos degrada la violencia,

el hombre a de gritar por la decencia

unido a la mujer en la querella,

tan sólo la unidad la fuerza sella,

no dejemos maltrato por herencia.

Las alas de la sonrisa

La pena es un ser vivo

que vivo se mantiene,

y ocupa el tiempo que el amor merece,

 en cambio la alegría es un instante

que juega al escondite,

es frágil y fugaz en la memoria,

en cambio la tristeza te acompaña,

te persigue,

porfía en el recuerdo,

y mientras, la sonrisa perezosa

se olvida de jugar entre tus labios.

El tiempo del dolor es todo un mundo,

y pesa más que la alegría pesa,

por eso a veces caminar no puedes,

mas cuando aflora a tu semblante el beso

la sonrisa renace con sus alas

para elevarte al vuelo,

e ingrávido verás cómo sonríe

feliz, la cara oculta de la luna.

Antonio Pastor Gaitero

La Palabra

…Si la palabra calla algo nos vence,

se hace hielo el acento,

la denuncia descansa en el olvido

y en el amor se paraliza el beso.

Hoy estamos aquí porque la espera

se hace insostenible ante el abrazo

que busca la palabra del consuelo,

estamos para dar sin concesiones

para sumar en voz conocimientos

y el tiempo acude y la palabra vuela

si el verso se hace hogar entre nosotros.

Antonio Pastor Gaitero

Fragmento del poema «LLegan las lluvias y la nieve llega »

del libro «Viaja el tiempo en un tren sin estaciones»

A Daniela Riso

Un local son paredes, unas puertas,

una techumbre, una ventana,  un suelo,

una barra y un nombre por modelo,

estantes con botellas entreabiertas.

 

Nunca será una casa si desiertas

quedan las manos vagas al consuelo,

si se aloja en olvidos el anhelo,

si se olvidan palabras por inciertas.

 

Concebiste un hogar y es necesario

agradecer abrazos que valoro

y sonrisas y lazos que consuelan.

 

Tú diste luz y voz al escenario

y al artista le diste su decoro,

y las palabras libres sobrevuelan.

Antonio Pastor Gaitero

 

La Fídula 4

 

Mundo de muñecos (1973)

Os complace extender sobre nosotros

vuestra tejida capa envolvente,

absorbente y necesaria del miedo

en este mundo de muñecos.

El temor es necesario para la quietud,

para caer en la apatía necesaria,

no ir más allá significa no moverse

y estar parado,

significa ser un instrumento

en vuestras manos.

Nos enseñáis la ignorancia

y nos llamáis analfabetos,

nos cerráis los ojos

para llamarnos ciegos,

pero vendrá el día de los libres, de la luz,

se romperán las cuerdas de los muñecos

y caerán los manipuladores.

Y correremos las marionetas al fin libres,

al fin libres

correremos las marionetas al fin libres.

Antonio Pastor Gaitero (1973)

 

SÍ, YA SÉ, NO ME REPITAN ES LO ESTABLECIDO Y BASTA (1974)

SÍ, ya sé,

sé por qué la pared es necesaria,

nos obliga a girar sobre los pasos,

nos encierra en los muros de la casa.

Sí, ya sé, no me repitan,

es lo establecido y basta.

El mismo ritmo de siempre,

la misma canción guiada

por la vieja batuta envejecida

de ese viejo maestro, la ignorancia,

que supo inventar la clase

que quiso ponernos tapias,

vendas de hormigón forjado

sobre los ojos del alma.

 

Sí, ya sé, no me repitan

¿Por qué cambiar si es cómoda la danza?

Sí, ya sé, no me repitan

es lo establecido y basta.

Cambiemos la melodía,

las ventanas de la casa,

la cultura nuestra escuela,

la dignidad nuestra causa. (1974)

Antonio Pastor Gaitero

Canción del libro «Primeras canciones»

Antonio y Jose Miguel 1974

José Miguel acompañándome en la canción y en la amistad

Antonio 1974

 

A Federico Laporta

A Federico Laporta por ilustrar

con sus dibujos el libro infantil

“Antoñito el orejas”

 

Le das color al cuento y lo reflejas

con la imagen precisa que acontece,

vida le das mi amigo, y me parece

que vivo siento el cuento del “orejas”.

 

Le veo en su colegio en Canillejas

y le siento llorar cuando padece,

y le recuerdo si desobedece,

y le dibujas  bien y le asemejas.

 

En los cuentos están sus travesuras,

los  miedos y los juegos de su infancia,

pequeñas y cercanas aventuras.

 

Todo aquello que tuvo su importancia,

su inocente actitud, y sus locuras,

y están también sus sueños e ignorancia.

Antonio Pastor Gaitero

Antoñito el orejas- foto

Hay tanto que decir en el presente

Vuelvo al papel en blanco, al lapicero,

vuelvo a mirar por la ventana ausente,

mientras recuerdos del ayer procuro

y un racimo de versos edifican

el poema que escribo en este instante,

son olas en un mar enfurecido

de acentos y palabras.

Hay tanto que decir en el presente.

En este desconcierto que vivimos

tan sólo la verdad existe en actos

que justifican en ciernes las razones,

eso está mal, eso está bien señala

la lógica que invoco ante la duda.

El acto justifica realidades.

No hay que decir si eres o si haces

tus actos ya señalan tu injusticia

o tu bondad tus actos documentan,

El tiempo es insensible a la mentira

y en ella recupera la ignorancia

el inculto que en fuerzas reaparece,

y eleva el grito si la razón ignora,

de nada vale que la historia escriba

ese pasado que la vergüenza guarda

con el horror violento de la muerte.

El odio en la ignorancia se sustenta.

Antonio Pastor Gaitero

Carta a un semejante

18 de marzo de 2020

Te escribo esta carta desde casa, aquí me quedo por ti, por todos, para intentar vencer en esta batalla a este virus implacable. Cada uno batalla en su medida y esfuerzo, sé que para ti la pared no es un paisaje y tus ojos habitan sus rincones, y tu mundo es ahora un espacio reducido donde la esperanza aguarda, pero tu lucha es mi ejemplo y te valoro.  La soledad nos une y nos hermana.

Aprecio al personal que te cuida y se desvela por cantar contigo la victoria. Nunca he sentido la unidad tan cerca como ahora que tenemos que respetar distancias.

Te escribo porque quiero decirte ¡No decaigas! Mantente firme, vamos a superar este desafío, y saldremos a la calle para recuperar el tiempo extraviado, para  brindar por la vida en un abrazo múltiple. Ánimo, nos espera la alegría.

Inventamos los ciclos de la luna

para seguir los pasos de la noche,

y no para soñar un beso cálido

si la luna a creciente se levanta.

Inventamos los ciclos de la aurora

para iniciar en la vereda el paso,

y no para enlazar luz y rocío,

o si la luz de la mañana sigue

pintando su color a las espigas.

Inventamos las horas, la disculpa,

para olvidar al vernos la sorpresa

y limitar así nuestros encuentros.

Así nos olvidamos del abrazo

en esta sociedad cuando consume

vacío en una compra innecesaria.

Reinvento el beso que al presente acude,

reinvento el mar que siempre nos espera,

y tu mirada invento, tu sonrisa,

y tu noche de estrellas consteladas,

y tu mañana de espigas y de abejas

que siembran flores en el beso ardiente.

Esto invento de nuevo si es preciso

para que sepas que mi paz espera

la noche y la mañana de tus sueños.

Antonio Pastor Gaitero